Peña Nieto participó en el panel de gobernadores de la 18 Asamblea Anual de la Canacintra.

El gobernador Enrique Peña Nieto lamentó el escenario de crispación política que se ha estado viviendo en los últimos días porque no sólo abona al clima de confrontación en vísperas de una justa electoral, sino que “pone en riesgo la colaboración institucional entre los órdenes de gobierno”. En consecuencia, hizo un llamado a retornar al clima de civilidad, prudencia, acuerdo y ánimo constructivo para “facilitar que los proyectos que tenemos por delante y la agenda a desarrollar, se puedan llevar a cabo”.

Al participar en un panel de gobernadores junto con sus homólogos de Guanajuato, Durango y Zacatecas, en el marco de la 18 Asamblea General Anual Ordinaria de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), el titular del Ejecutivo estatal precisó también que la coyuntura económica plantea nuevos retos y exigencias, por lo que exhortó a lograr un trabajo conjunto y orquestado entre los tres niveles de gobierno para posibilitar la realización de los compromisos ya acordados.

En presencia de los industriales del país reunidos en su convención anual, encabezados por su presidente Miguel Marón Manzur, advirtió que la crispación alentada por un partido político está provocando que “proyectos que hemos venido impulsando desde el Estado de México con la participación del gobierno federal, hoy en día corren el riesgo de posponerse su realización o incluso de cancelarse”.

Ante los gobernadores de Guanajuato, Juan Manuel Oliva Ramírez, y de Durango, Ismael Hernández Deras, el mandatario mexiquense dijo que es de lamentarse el ambiente de crispación política que se ha suscitado y que está alterando los acuerdos a los que se había llegado con el gobierno federal, “y no dudaría –destacó– que también con los gobiernos municipales se estuvieran también trastocando estos acuerdos”.

Puso como ejemplo que “el día de hoy, fuimos informados que uno de los proyectos del Tren Suburbano que estamos trabajando con el gobierno federal y donde habíamos ya acordado la participación que cada orden de gobierno estaría teniendo, se posponía por séptima ocasión el fallo o la recepción de ofertas por parte de las empresas participantes”.

Peña Nieto insistió en que es de “lamentar ese ambiente de crispación, de descalificación, de agravio que se ha tenido para con mi partido y que, sin duda, estará afectando lamentablemente la relación entre gobiernos”, porque no es posible convocar a un acuerdo y llamar a los consensos mediante agravios, señalamientos y descalificaciones, “porque no ha sido ese el tono que se ha tenido en el pasado, cuando sí ha sido posible celebrar acuerdos”.

Consideró que la disputa política debe darse entre partidos y no ser tema de los gobiernos. “A veces, queda la impresión y esa es la lectura que como gobierno hemos tenido con las actitudes de dirigentes partidistas, pareciera que el interés de los gobiernos o del gobierno federal es ganar la elección y no asumir el compromiso con las prioridades que hoy el país reclama y necesita: preservar el empleo y darle mayor impulso a la actividad económica como medida contracíclica ante la crisis que está viviendo el mundo y nuestro país”.

El gobernador, quien previamente había hecho un resumen de las políticas estatales en materia de seguridad social, económica y pública, destacó que la entidad tiene más de 15 millones de habitantes y genera casi el 11 por ciento del PIB nacional; afirmó que “llama la atención que cuando nos aprestamos a vivir un proceso electoral, entonces se despiertan los monstruos y es momento para hablar con descalificaciones y en agravio a los partidos que en otro momento colaboraron con responsabilidad en dar lugar e impulsar reformas que están seguramente impulsando el desarrollo de nuestro país”.

Manifestó su deseo de que este clima no propicie los desencuentros y sí haga posible que proyectos ya convenidos y acordados con el gobierno federal y con los gobiernos municipales, se puedan llevar a cabo.

Peña Nieto reiteró que su administración busca fundamentalmente alentar el desarrollo económico, propiciar mejores condiciones para que los empresarios hagan sus negocios, teniendo siempre de lado y de forma solidaria al gobierno del Estado “para que juntos podamos generar el mejor ambiente para la realización de negocios, generar empleos, riqueza y que todo esto se traduzca en mayor bienestar para las familias mexiquenses”.